Tacna y la suprema estupidez
El efecto Caballo Loco (oh sí, Alan García) en el fabuloso Reino de Ancat.
«Sabemos quienes hablan en nombre de las naciones, pero ¿quién habla en nombre de la especie humana?, ¿quién defiende a la Tierra?»
Mientras el dial se encuentra en la frecuencia de "Radio Caplina" un decimonónico pseudoperiodista insta a los oyentes a regalar escarapelas por la peruanidad y a recuperar a las "secuestradas" Arica y Tarapacá...
Disclaimer: el autor de esta columna gusta de su ciudad pero no se traga el rollo ese de "Tacna, la Atenas de América", no cree en chauvinismos baratos y le encantaría ver a Latinoamérica como una patria grande.
Dicen los entendidos que allá por el siglo XX mi pequeño pueblo era conocido como "la Atenas de América", una gran ciudad cosmopolita, famosa por sus artistas y donde sus habitantes eran dueños de grandes negocios; personalmente me es difícil digerir la idea de la dualidad de una ciudad pequeña y donde (dicen) todos se conocían y a la vez cosmopolita y plagada de "grandes negocios".
Al final el asunto no es discutir la verdadera naturaleza de la Tacna antigua, eso se hará en otra columna, sino el efecto Caballo Loco, o síndrome de la patada, en este agujero negro del sur del Perú y cómo se utilizan fantasmas para extenderlo.
Hoy es viernes 17 de enero en el fabuloso Reino de Ancat, radio Caplina es la peor cagada que puede haber, la más cruel tortura auditiva, un locutor con voz de hobbit despotrica contra sus enemigos políticos y elogia a quienes se han comprometido a regalar escarapelas que serán repartidas a fin de ser usadas el día 27, entre los mecenas de su gesta patriótica se encuentran un alcalde distrital y un profesor que llamó a la radio y terminó siendo obligado a comprometerse con la causa.
Hace unos días, nuestro muy apreciado Sr. Ego Colosal, más conocido como Caballo Loco, por obvias razones lanzó la propuesta de embanderar el país y suspender la hora de entrada a trabajar hasta las 11 de la mañana para así poder disfrutar del onírico paisaje de este país escuchando la sentencia del tribunal de la Haya, inmediatamente le hicieron un cyberbullying de los más divertidos de este año.
Días después, el alcalde provincial de Tacna, en la que probablemente haya sido la declaración más sensata de su vida (la última vez que abrió la boca para algo serio causó una crisis de pánico financiero en la Caja Municipal), descartó la propuesta de Alan Damián, pero ¡oh sorpresa! el efecto Caballo Loco había calado en la señora "yo-no-voy-a-indultar-a-mi-api" Keiko Fujimori.
Así como quien no quiere la cosa, se fueron pronunciando a favor y en contra distintas personalidades, el escándalo feisbukero fue por un momento sobre lo dicho por Alan y probablemente haya pasado lo mismo en twitter, finalmente llegamos a hoy.
Amaneció el día viernes 17 en Tacna y sugiero subir cuatro párrafos para que se imaginen la horrible escena sonora; pero, ¿qué pasó exactamente?
Está bien, me acabo de mandar un florazo y todavía no he dicho nada, aquí va una lista (oh sí, listas, qué divertido es leerlas) de sucesos:
1. El locutor hace un llamado al pueblo para recuperar a las "secuestradas" Arica y Tarapacá.
2. El mismo tío con voz de hobbit rebaja tu peruanidad, la mía y la de todos a cuántas escarapelas vamos a donar.
3. Varios alcaldes de centros poblados de la región optaron por acoger la propuesta de nuestro Gran Mentiroso en vez de escuchar al alcalde provincial (bueno ya, nadie escucha nunca a Fidel, eso no es novedad) o a la gobernadora (¿tenemos gobernadora?).
4. El locutor nos pone en un escenario donde nosotros tenemos el deber de ser una horda de zombies hambrientos de cerebros chilenos.
5. Se repite (por terecera vez, aunque en la lista sólo haya contado dos) el asunto de las escarapelas, si no te pones mínimo 70 como cierto alcalde no eres peruano pues.
6. La representante tacneña en el parlamento opina que sería buena idea declarar feriado el 27.
Creo que bastan esos seis cortos puntos para entender el asunto; así como no me trago el rollo de "la Atenas de América" tampoco me creo ese cliché cojudo de lo que necesitan "los líderes del nuevo milenio" y un montón de otras pavadas que son las muletillas de mi generación; Tacna está cubierta por una nube de estupidez producto del efecto Caballo Loco, cuando la lógica nos dice que hay que seguir con nuestras vidas como si el 27 fuera un día cualquiera nosotros hacemos un circo de eso, ojo que el hecho de haber tomado a un locutor de radio como ejemplo no significa que sea la única voz imbécil de la ciudad, hay de hecho muchas otras.
El buen Sagan se preocupó por quién defendería a la Tierra porque esta sufre mientras todos defienden a las naciones. Hoy, más que nunca, tenemos la necesidad de unir los lazos de toda Latinoamérica (no creo que tenga que explicar eso, ¿verdad?) pero en nuestro mundo paralelo Tacna sigue viviendo por succión de lo que le queda de pasado, de un pasado que a cada segundo es más y más lejano, sobre la base de una guerra que perdimos hace más de cien años, de supuestos héroes que desaparecieron generaciones atrás y que de hecho dejaron de nacer hace mucho, somos Tacna, la que camina viendo siempre hacia atrás y sobre nuestra ya pesada cruz ahora pesa el síndrome de la patada.